planoroma

planoroma

jueves, 17 de diciembre de 2015

Rabo de buey vs. Coda alla vaccinara

* * *
La Coda alla Vaccinara es un plato tradicional de la cocina popular romana, su origen hay que buscarlo en las tabernas del barrio romano dónde vivían los carniceros, i Vaccinari. El guiso se hace con rabo de buey o de ternera, que requiere menos tiempo de cocción.

Ingredientes:

  • 1kg. de rabo de buey o ternera
  • 100 gr. de tocino
  • 1 cebolla grande, 1zanahoria, 2 ramas de apio, 2 dientes de ajo, perejil picado, 
  • 1kg de tomates pelados y escurridos;
  • 400 ml. de vino blanco; 
  • 4 ó 5 clavos, sal, pimienta, y aceite.
  • Para la salsa: 20 gr. de piñones, 30 gr. de uva pasa, 3 ramas de apio, 2 gr. de cacao amargo en polvo.
Lo primero que tenemos que hacer es partir el rabo siguiendo las coyunturas o articulaciones,  teniendo cuidado de no romper el hueso. Se lava en agua fría para eliminar la sangre o como alternativa se deja en remojo y cambiamos de vez en cuando el agua. Cortamos en dados el tocino y conservamos. Picamos muy fino el ajo, la cebolla, zanahoria, el apio, y el perejil, conservamos.

Ya estamos preparados para empezar a cocinar el rabo. Freímos el tocino y el rabo, dejamos que se dore. Añadimos los clavos, las verduras picadas y una cuchara de perejil picado, cocemos a fuego bajo para que se mezclen bien los sabores y se evapore el agua de las verduras. Salpimentamos, y añadimos el vino, subimos el fuego para que se evapore el alcohol, y dejamos cocer al menos 20 minutos a fuego bajo. Transcurrido este tiempo se incorpora el tomate pelado, picado y escurrido, mezclamos, tapamos y dejamos que se cocine a fuego muy lento durante 2 ó 3 horas, removemos de vez en cuando. Se puede añadir un poco de agua si queda muy seca la carne.

Mientras tanto limpiamos las dos ramas de apio que nos servirán para la salsa, quitamos los filamentos y lo troceamos finamente, lo cocemos durante un par de minutos y reservamos. Metemos a remojo las uvas para que se hidraten. Controlamos el guiso, antes de que empiece a despegarse la carne del hueso retiramos del fuego. Cogemos un cazo de salsa en el cual disolvemos el cacao amargo en polvo. Añadimos al rabo el apio cocido, las uvas escurridas, los piñones y la salsa con el cacao, dejamos cocer quince minutos y ya está a punto la receta de la Coda alla Vaccinara.

Buen apetito!!!!!
* * *




martes, 8 de diciembre de 2015

Renacimiento en Villa Farnesina


* * *
Villa Farnesina es una joya del renacimiento en el corazón de Roma, que a veces no se visita por desconocimiento de la misma. La villa fue diseñada y hecha por el arquitecto Baldassarre Peruzzi, por encargo del banquero de Siena, Agostino Chigi, en el momento de mayor esplendor del financiero. El interior fue decorado por el mismo arquitecto, por Raffaello, Sebastiano del Piombo y por el Sodoma, con pintura al fresco inspirada en mitos clásicos. En 1511 la villa ya estaba finalizada y en parte decorada.

El edificio está compuesto por un bloque central y dos pequeñas alas laterales, y consta de dos plantas. En la primera planta resultan especialmente llamativos los frescos de la Sala de Galatea, una de las obras más importantes de Rafael. En el techo se pueden contemplar las pinturas de astrología que muestran la posición de las estrellas el día del nacimiento de Chigi, el primer propietario de la villa. En la planta superior se sitúa otra de las estancias más bellas de la villa, la Sala de las Perspectivas, que basa su decoración en la ilusión óptica creada por los frescos que muestran la ciudad de Roma a través de columnas de mármol. Si hay suerte, y además es un día de sol, el jardín es espléndido, y las vistas desde la Villa son una maravilla.  El edificio se caracteriza por la estrecha relación que hay entre la construcción, la decoración y el jardín, es como si cada uno de estos elementos fuese uno la continuación del otro.

Agostino Chigi llamado “el mágnifico” vivía aquí su espléndida vida de mecenas del Renacimiento entre riqueza y honores, era protector de artistas, amigo de príncipes, cardenales y papas que amaba recibir en sus aposentos. Eran famosas sus fiestas y banquetes celebradas en los salones de la villa, incluso en las caballerizas, espléndidamente decoradas para demostrar que los establos de los Chigi eran más fastuosos que los salones del Palacio Riario que estaban construyendo en frente de la villa. Sus banquetes los más lujosos de la época, se servían en platos de oro y plata, finalizada la comida podían tirarse al Tevere, en demostración de su opulencia, pero redes estratégicamente colocadas restituían al propietario tan valiosa vajilla.

Después de su esplendor durante la vida de Agostino, la villa fue comprada por el Cardenal Alessandro Farnese, de aquí viene el nombre de Farnesina, para distinguirla del palacio Farnese, al otro lado del río, y según un proyecto de Miguel Ángel un puente sobre el Tevere debería unir ambas propiedades de los Farnese. La villa pasó posteriormente a los Borbones, después por enfiteusis al Duca de Ripalta y finalmente fue adquirida por el Estado italiano como sede de la Academia de Italia. Ahora es propiedad de la Accademia Nazionale dei Lincei.

Si decidís visitarla es aconsejable consultar los horarios.


* * *



















 

domingo, 15 de noviembre de 2015

Rollitos de pez espada

* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *
Gli involtini de pez espada es una receta con el  sabor, olor y color típica del sur de Italia.

Ingredientes para 4 personas:
  • 500 gr. de pez espada cortado en lonchas muy finas;
  • 3 cucharas de pan rallado;
  • 2 cucharas de queso rallado tipo parmigiano;
  • una cuchara de piñones y otra de uva pasa;
  • aceite virgen de oliva, cebolla, perejil, laurel, sal y pimienta.
Sofreímos la cebolla, cuando esté dorada añadimos unos 150 gr. de pez espada cortado finamente en dados, el pan rallado, los piñones, el queso, las uvas pasas, sal y pimienta. Mezclamos todo y lo freímos durante unos minutos, conservamos. Con mucho cuidado disponemos las lonchas de pescado en una superficie dura, espalmamos con una maza de madera, de manera que conseguimos unos filetes finos. Depositamos en el centro un par de cucharas del relleno que hemos preparado, enrollamos procurando cerrar los extremos. Sellamos con un palillo, los pasamos por pan rallado y los colocamos en una fuente de horno previamente aceitada, separados por una hoja de laurel. Añadimos un chorro de aceite de oliva, enfornamos durante 20 minutos a 180º, cuando estén dorados los sacamos y servimos calientes. Hay más variedades de esta receta que poco a poco os iré dando. Ya me contaréis como os ha salido.
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *





miércoles, 4 de noviembre de 2015

San Pietro in Vincoli y el Moisés



* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *
La basílica de San Pietro in Vincoli debe su nombre a las cadenas (del latino vincula) que conserva en su interior y que según la tradición fueron utilizadas para atar a San Pedro en la cárcel Mamertino en Jerusalén. En el siglo V la emperatriz Elia Eudocia mujer del emperador Teodosio II recibe del Patriarca de Jerusalén las cadenas como regalo por su visita a la ciudad. La emperatriz las envió a su hija Licinia Eudossia, mujer del emperador de occidente Valentiniano III, que a su vez las dona al Papa León I, conocido como León el Magno. La iglesia ya tenía parte de estas cadenas  y cuando el Papa las juntó, milagrosamente se unieron en una sola. Para celebrar y recordar el milagro se construyó en 442 la basílica, gracias a la ayuda de la emperatriz Eudossia, razón por la cual también es conocida como Basílica Eudossiana, y ha sido aquí dónde se han conservado las cadenas visibles en el altar.  Este milagro tiene una interpretación histórica, Eudossia hija del emperador de oriente, casada  con el emperador de occidente, podría representar el vínculo que una de nuevo el imperio divido.

La basílica Eudossiana del siglo V ha sido restructurada a lo largo del tiempo por distintos Papas; Adriano, Sisto IV, Giuliano III, de estos dos últimos son los escudos pertenecientes a la familia Della Rovere que se encuentan en el templo. El interior es de tres naves divididas por columnas de mármol griego de una única pieza con capitel dórico. La nave central tiene una pintura al fresco que narra el milagro de las cadenas de San Pedro, en la nave derecha se conserva la pintura de San Agustín, del Guercino, la sacristía tiene un pavimento de mármol probablemente proveniente de las Termas de Trajano, pero sin lugar a dudas el monumento por el cual la iglesia es conocida en todo el mundo es el Moisés de Miguel Ángel destinado al monumento fúnebre de Giulio II en la Basílica de San Pedro en el Vaticano. 

Cuando le encargaron el monumento fúnebre Miguel Ángel pasó ocho meses en Carrara seleccionando los mejores bloques de mármol para realizar la obra. A su vuelta a Roma el proyecto se paralizó desencadenando la ira del artista. Con la muerte del Papa y la elección de León X, el proyecto se redimensiona y se traslada para su ejecución a la iglesia de San Pedro in Vincoli. Cuando se reanuda el trabajo se finaliza el Moisés y los prisioneros, pero de nuevo se interrumpe la empresa, el papa Paolo III convence a Miguel Ángel para que pinte el Juicio Final en la Capilla Sixtina. El Mausoleo de Gulio II fue finalizado por alumnos del maestro, consistente en una simple fachada con seis nichos para esculturas, muy lejos del proyecto originario que tenía cuarenta. “I Prigioni” un grupo de seis estatuas encadenadas en diversas posturas se encuentran cuatro en la Galleria de la Academia de Florencia y en el museo del Louvre las otras dos casi finalizadas. Afortunadamente el Moisés se conservó en esta iglesia y desde 1545 se puede admirar esta obra maestra en el transepto de la iglesia. El Moisés de rostro duro y mirada fiera, con las venas y músculos en tensión resaltan como si la estatua palpitase bajo el impulso de la ira, está sentado solemnemente con las Tablas de la Ley en la Mano. A los lados del Moisés están las estatuas Lia y Rachele símbolos de la vida activa y contemplativa, obras de Raffaello di Montelupo. En la parte superior se encuentra la estatua yacente de Giulio II, tradicionalmente atribuida a Maso del Bosco, no obstante últimamente se piensa que puede ser obra del mismo Miguel Ángel. Las restantes figuras en alto son, una Sibila y a la derecha un Profeta también obra de Raffaello di Montelupo, mientras que la escultura de la Virgen de pie con el Niño Jesús,  fue realizada por Scherano da Settignano. 

Destaca en la iglesia un mosaico del siglo VII con San Sebastián vestido de soldado, viejo y con barba, al estilo iconográfico bizantino, diverso de la posterior iconografía romana que lo trasformó en un joven bellísimo. Se encuentra en la iglesia el monumento fúnebre del cardenal Nicola Cusano obra de Andrea Bregno, cardenal titular de la iglesia de San Pietro in Vincoli.

Horario: todos los días de 8:00 a 12:30 y de 15:30 a 18:00 horas.
 

Estamos en las inmediaciones del Coliseo, Foros Imperiales, Vía Cavour, Piazza Vittorio.
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *